El sufrimiento es un estado mental que afecta la química de nuestro cuerpo, puede crear desde depresiones hasta enfermedades. La liberación de todas las toxinas existentes en nuestra vida tanto físicas, mentales , emocionales y espirituales deben ser  removidas y transmutadas para lograr un éxito real. 

 

 Limpieza energética general es la clave.

 

La medicina Energética engloba todas las técnicas de medicina natural donde se pone énfasis en movilizar la energía de manera en que esta pueda llegar a todos los rincones de nuestro campo electromagnético. Quiere decir ordenar y potenciar  la frecuencia con la que se mueve nuestro cuerpo. Esto corrige desequilibrios energéticos que pueden causar molestias tanto físicas, emocionales, mentales y espirituales. 

 

El orden de nuestros cuerpos energéticos requieren un constante reequilibrio ya que vivimos expuestos a situaciones que suelen generar que nuestros centros se estanquen, carguen o se vacíen. 

 

Una buena sesión de reequilibrio energético genera un sentimientos de liberación y bienestar inmediato. Es importante incluir en nuestra vida diaria hábitos que generen una buena vibración, quiere decir que hagan a nuestras células vibrar alto, en felicidad y tranquilidad. Es posible generar estados positivos diarios y esto hará que la energía se habitúe a estar en esa frecuencia. Cuanto más repitas todo aquello que te genere una buena sensación tu ser aprenderá a mantenerse en estado de relajación y apertura. Así se genera poco a poco estado de conciencia más abierta y expansiva, entonces empezaremos a ver el mundo y las situaciones de forma mas fluida y no nos engullirá la preocupación. Tomando conciencia de todas las demás opciones que existen en la vida. Esto es lo que se llama apertura mental, expansión de la conciencia, liberación espiritual,  reconexión con el ser superior.

 

Ya que el ser superior es simplemente nosotros mismos desde una conciencia mas vibrante, al afinarnos en una frecuencia elevada conectamos rápidamente con niveles  sutiles de la mente  y por lo tanto nuestra visión del mundo se amplia y podemos sentir así la verdadera conexión con nosotros mismos. Ya que todos somos uno la conexión con el Todo es lo que hace que podamos comprender la vida como una gran océano donde  cada uno es solo una gota de el. No mas ni menos. Somos lo que somos y aceptemos con felicidad y agradecimiento esta vida y esta experiencia. Esta es una experiencia en el recorrido de nuestra alma. 

 

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